En Panamá imperó la pena de muerte durante 14 años. La primera Constitución sancionada el 15 de febrero de 1904, estableció en su artículo 139 permitía la pena de muerte por homicidios atroces".
Sin embargo, mediante una reforma constitucional introducida en 1918, se abolió esa cita con los verdugos para los asesinos y ese criterio se mantiene invariable hasta hoy día, en el artículo 30 de la Carta Magna.
Un reciente reporte de Amnistía Internacional revela que 94 países practican actualmente la pena de muerte en el mundo, incluido Estados Unidos.
La ola de violencia que sacude a Panamá ha provocado que la mandataria Mireya Moscoso propusiera instaurar la cadena perpetua para los homicidas y delincuentes de alta peligrosidad.
Paralelo a ello, su copartidario y legislador Marcos González -dentro del marco de los debates de reforma constitucional- planteó instaurar la pena de muerte.
El ministro Arnulfo Escalona, quien como una especie de "Rambo" encabeza las redadas del operativo "Mano Dura" contra la delincuencia, explicó a Crítica que la cadena perpetua se aplicará a delitos "atroces" tales como homicidios, secuestros y violaciones.
Al ser increpado sobre si la medida no resulta extrema, sostuvo que es hora de actuar en vista que los delincuentes "tienen encarcelada a la comunidad"; es más, increpó ¿qué opina que se debe hacer con una persona que rapte a un niño menor de 12 años, lo secuestre, lo viole, y después lo mata para ocultar su crimen? ¿ se le debe dejar en la calle... hagámonos todos esa pregunta entonces.
Escalona afirmó que todo el que comete ese tipo de crímenes tendrá que sufragar sus propios gastos en los centros penales. "Hay mucho trabajo que hacer en este país, muchos huecos que tapar y muchas áreas verdes que podar".