La recién terminada Eurocopa, donde Grecia triunfó, tuvo más brillo en jugadores y estrellas que lo que presentará la Copa América, que arrancó ayer en Perú.
El más antiguo de los torneos presenta la triste nota de no contar con el alma del cielo deportivo de países como Argentina, Brasil, Uruguay, entre otros.
Serán, en algunas ocasiones, experimentos con la banca, será una Copa de bajo perfil, donde habrá ausentes a tutiplén.
Muchos jugadores prefirieron descansar, otros no se inmutan, pues ya son súper estrellas y la Copa no les llama la atención.
Algo que no pasó en Europa, donde cada conjunto presentó sus mejores armas, y los técnicos se jugaban su puesto, prueba de ello es que muchos lo perdieron.
Acá la emoción es mucha, de todas formas se trata del mejor fútbol del mundo, el sudamericano, el exportador número uno de mega jugadores para los mejores clubes del mundo.
No se extrañen con una sorpresa, ya pasó en la Champions, en la Euro y en la Libertadores. Pero con el bajo performance de los equipos, acá casi todos están parejos.
¿Mi favorito? Creo que por este 2004 este adjetivo no existe, ya eso pasó a la historia, el Porto, Grecia y el Once Caldas se encargaron de eliminar a los favoritos.
Lo que hay que hacer es disfrutar de una fiesta presentada por los peruanos, donde lo más importante será el replanteo del torneo, pues así como está podría morir.
