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Un golpe de campeonato, uno de esos que utilizan los grandes campeones para no darles largas a una pelea. Así fue que el mexicano Édgar Sosa terminó el pleito contra el panameño Carlos Melo.
"No me pude librar de esa mano, el golpe fue muy bueno, me paré herido, porque quería ser campeón, pero la verdad ya estaba muy mal", así reacciona el panameño "Shangai" Melo, asimilando la derrota sufrida en la Arena México de la capital mexicana.
Un gancho letal y preciso colocó Sosa con su mano izquierda en la zona media de Melo, quien con algunos pasos intento mantenerse en pie, pero sin tener éxito en evitar su caída al enlonado.
"Sosa sabe pelear, siempre buscó darme golpes precisos hasta que lo consiguió", expresó Melo.
El panameño, para sorpresa de casi todos los entendidos del boxeo en suelo azteca, hizo una pelea adentro contra Sosa, logrando conseguir ubicarle buenos golpes al campeón, aunque el costo fue también estar más cerca de la zona de tiro del mexicano.
"No tenía otra opción, no podía venir a huir en la tierra del campeón, era lo que tenía que hacer", expresó "Shangai", quien consiguió que algunos de los 11 mil asistentes a la Arena México, le dieran un aplauso por su forma de pelear, además de querer llevarse de recuerdo fotos y autógrafos del canalero.
La pelea acaba oficialmente por TKO a los 2: 47 del quinto asalto, cuando el árbitro estadounidense Frank Garza decide poner fin a la contienda, tras ver que Melo no reaccionaba antes los ataques de Sosa.
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