El presidente de Bolivia, Evo Morales, dijo ayer que no pedirá perdón al Gobierno del Perú por haber calificado de "genocidio" a los enfrentamientos en la región amazónica de ese país, en los que murieron al menos 34 personas, entre policías e indígenas.
"He estado escuchando a algún ministro de la hermana república del Perú que me dice que pida perdón. Cuando se trata de defender la vida, no hay nada por qué pedir perdón", declaró el mandatario.