Kamal Jarrah, director de relaciones culturales del Ministerio de Educación de Irak, salía de su casa al trabajo, en la mañana del domingo, cuando fue interceptado por un hombre que le disparó.
Según los informes, Jarrah, de 63 años, murió poco después en el hospital de Yarmouk. El ataque ocurrió en Ghazaliya, al noroeste de Bagdad, un área donde predominan los musulmanes sunitas, grupo que más apoyaba al ex presidente Saddam Hussein.
Este es el segundo asesinato de altos miembros del gobierno en el fin de semana.
El sábado, el subsecretario del Ministerio de Asuntos Exteriores de Irak, Basam Kabba fue asesinado de la misma forma, cuando salía de su sitio de trabajo.
EXPLOSIONES
Por otra parte, el domingo estalló un cohete en la fuertemente custodiada Zona Verde de la ocupación estadounidense.
La explosión provocó daños menores en el Palacio Republicano, donde el administrador civil L. Paul Bremer tiene sus oficinas centrales, manifestó un funcionario a condición de mantener su nombre en el anonimato. Este es el tercer ataque con coche bomba en Irak en menos de una semana.
Una serie de explosiones fueron escuchadas por varios testigos en las inmediaciones del centro de operaciones de la coalición estadounidense en Bagdad.
EU DEFIENDE SU CAUSA EN MEDIOS
Estados Unidos se mostró decidido a hacer lo posible por aplastar a la resistencia en Irak que, a pocas semanas del traspaso del poder al nuevo gobierno interino.
El secretario de Estado norteamericano, Colin Powell, reconoció que la ola de ataques y la inseguridad ciudadana en Irak dejan al descubierto la vulnerabilidad del nuevo gobierno interino, que debe asumir las riendas el próximo 30 de junio.
