Para llegar a la madurez es preciso haber desarrollado la facultad de hacerse responsable de la propia vida, independiente de los demás, sea papá, mamá u otras personas. Muchos padres, especialmente las mamás, cultivan intensamente el espíritu de dependencia en los hijos, cuando más bien deben modelar su autonomía.
El ser humano depende de la familia mientras va creciendo, pero, en la misma medida, va adquiriendo independencia y criterios, valores y principios propios.
Lógicamente que nadie es totalmente independiente, pues todos estamos muy relacionados con los demás.
Pero debemos siempre conservar nuestra forma propia de ver la vida y de pensar, cultivar y defender nuestros valores y creencias. Para ser una persona madura y exitosa, hay que adaptarse a los cambios que ocurren en la vida, aquellos sucesos negativos que siempre han de llegar y que son parte de la vida.
Algunas veces, la vida nos ofrece situaciones crueles, de las que parece que nunca podremos salir. Sin embargo, no aceptar la realidad y adaptarse lleva a cultivar una serie de emociones que engendran enfermedad.
La adaptabilidad y la flexibilidad implican una clase muy preciosa de madurez que puede evitar un trastorno mental.
¿Es usted maduro o inmaduro? Hágase un examen de conciencia para comprobar si usted está cultivando algunos de estos signos de inmadurez.
Es importante que usted examine bien estos aspectos de su personalidad, pues le pueden estar ocasionando serios problemas en su vida, en su relación con sus seres queridos y con otras personas. Queremos que usted sea una persona mucho mejor y luchamos para conseguir eso para todos.
Con la ayuda del Señor se pueden superar muchas cosas en nuestra vida que no están del todo bien.
En la medida en que usted se sienta bien con usted mismo, se sentirá mejor y más feliz en su relación con las personas que lo rodean, que lo aman y desean lo mejor para usted, Con el Señor sí se puede, porque con El podemos vencer todo lo que venga en la vida y superar la inmadurez. Con Dios, en verdad, seremos...¡Invencibles!