Al salir de este santo lugar estas palabras se me quedaron incrustadas en mi mente. Y es que son el inicio de una canción que me encantó en el III Encuentro Juvenil Pentecostés 2004 en la Parroquia del Espíritu Santo en la 24 de Diciembre.
Un fin de semana completo cientos de jóvenes se reunieron para conocer el poder del Espíritu Santo como preámbulo a la celebración del Pentecostés el próximo domingo.
Las comunidades Juveniles Integradas de Ocú también dijeron presente. Todo estuvo organizado por la Pastoral Juvenil de esta parroquia que está coordinada por las hermana Aderith Alvarado y Adriana Valencia.
Lo mejor es que ya arrancaron la organización del IV Encuentro. Felicidades a estos jóvenes que por tres días le demostraron a todo el país que Panamá tiene esperanza.