El Valle de Antón se ha convertido en el sitio perfecto para visitar. Sus sitios turísticos, el clima agradable, sus hoteles y cabañas; sin embargo, hay algo ahora que se suma a esta lista y que lo hace muy especial, el nuevo Centro de Anfibios, en el que hay una gran variedad de especies, incluyendo la rana dorada.
Según los estudios y datos estadísticos de científicos y biólogos nacionales y extranjeros, un 40% de las 196 especies de anfibios que viven en Panamá y países fronterizos, están en peligro de extinción, y esto es motivo de preocupación porque se trata de animalitos muy frágiles y que también cumplen su cometido en el medio ambiente.
Se trata de un proyecto ambicioso, que ya empezó a funcionar hace un mes en el Zoológico El Níspero de El Valle de Antón. Allí encontrará usted el Centro para la Conservación de Anfibios y podrá observar a la rana dorada y otras especies en un hábitat casi parecido, en el que han vivido por años, pero ahora protegidas contra el hongo mortal.
ESPECIE EN EXTINCION
Los biólogos en Panamá indican que en el mundo la mitad de las seis mil especies está en riesgo de desparecer, si no se hace algo pronto para salvarlas. Y es por ello que con el apoyo de científicos del extranjero se construyó el Centro de Protección de los Anfibios en El Valle de Antón, donde hay más de 30 especies, incluyendo la rana dorada, que está en peligro de extinción.
Carlos Mauricio Caballero, quien es el director del Zoológico El Níspero, donde está ubicado el Centro de Anfibios, explica que se busca mostrar al público nacional y extranjero la diversidad de anfibios con la que cuentan y de esta manera se puede educar a la población de que tome conciencia sobre la importancia de la protección de los anfibios en el mundo y especialmente en Panamá.
CONTROL BIOLOGICO
Caballero explicó que los anfibios indican la calidad del medio ambiente y ejercen un control biológico a muchas especies patógenas a los seres humanos, como los mosquitos transmisores de enfermedades como el dengue, fiebre amarilla y malaria, y por ello es de gran importancia proteger a los anfibios, y esto incluye a los sapos comunes que muchas personas piensan que no son importantes, pero cada uno de los anfibios tiene una tarea en el ambiente.
Edgardo Griffit, director del Centro de Anfibios, dijo que este es un gran proyecto que precisamente busca proteger las ranas y otros anfibios, porque estos animalitos también piden ser protegidos ante las dificultades que ellos enfrentan, pues las causas de este peligro en anfibios son la destrucción de su hábitat y la contaminación del ambiente,
Además, se suma a esto el daño que produce en ellos un hongo que afecta su respiración y puede causarles la muerte en días. Los estudios indican que el hongo ya ha acabado con la vida de varias especies de anfibios alrededor del mundo y Panamá no es la excepción.