Mia Farrow se mostraba optimista cuando el pasado 30 de abril comenzaba una huelga de hambre en protesta por la situación de Darfur (Sudán). Pero finalmente su entusiasmo no ha impedido que su salud se haya ido deteriorando con el paso de los días y precisamente ha sido su precariedad física la que le ha llevado a abandonar su protesta antes de tiempo.