La familia vive en Guásimo, en la Costa Abajo de Colón, donde hay condiciones de difícil acceso y la mayor parte del camino, es por el río Miguel de La Borda.
Dimas, quien a pesar de tener este problema es muy inquieto, cuenta con la ayuda para sufragar los altos costos del tratamiento a través un empresario de la Zona Libre de Colón cuya identidad no reveló y que le envía mensualmente 50 balboas que utiliza para las citas en el Hospital del Niño.
El último encuentro con el médico era el pasado 6 de abril, pero la cita se perdió por las limitaciones económicas de la familia Alabarca-Alveo, que se dedica a la agricultura de subsistencia.
De acuerdo con su madre, los medicamentos que le ha recetado el médico le ayudan a mantener la piel húmeda y son muy costosos, entre estas Nutraplus H, que apenas tiene 2 onzas, con un costo de 10 balboas.
Facunda con su niño en brazos dijo que a pesar de que Dimas, padece esta enfermedad está gordito y muy despierto.
Tiene cuatro hijos, pero nadamás Dimas, presenta esta deficiencia desde su nacimiento.
La ayuda que solicita la familia del bebé, es que pueda recibir su tratamiento constantemente, porque se hace difícil trasladarse desde la apartada región de la Costa Abajo hasta la capital. Sólo el viaje desde Guásimo hasta la ciudad de Colón, toma unas seis horas, dependiendo del estado del tiempo, mientras que por helicóptero hasta la capital, sólo son 40 minutos.