Hay un dicho que cuando lo esperado está a la vista, se dice "que hasta un ciego lo ve". De allí que el triunfo electoral de Martín Torrijos estaba suficientemente claro, excepto que otros factores lo hubieran impedido. Aún con todas las ventajas permitidas a los sectores oficialistas, en la mente del pueblo se habían acumulado por un largo quinquenio, un incorregible desgreño administrativo.
Pese a algunas arbitrariedades, el Tribunal Electoral salió airoso y la más beneficiada ha sido la democracia panameña, porque convalidó la voluntad popular y fue estricto al final de los resultados en las diferentes instancias frente a algunos desaciertos de prepotencias e intolerancias.
Fueron leves los insultos e improperios en comparación con contiendas electorales de nuestro pasado republicano, y es porque, principalmente, el propio Martín se elevó por encima de los insultos y las malediscencias, patrocinados por algunos que a la ligera pretendieron menoscabar su honor, sin que se inmutara en lo absoluto, sabedor de que su conciencia se mantenía tranquila y como hidalguía superior de su espíritu desde la tribuna en que su verbo fue claro y sereno en la histórica concentración de la Plaza 5 de Mayo, como cierre de campaña, dijo como el mejor cristiano.
"Si en algún momento he ofendido a alguien, pido que me disculpe". Esta decisión fue el impulso mayor para dejar sin estorbo su espíritu y dejar inermes la agresividad de sus contrarios que andaban en la búsqueda de mentiras y diatribas por falta de argumentos valederos.
Con las limpias credenciales que tiene en sus manos Martín, y firme en su propósito de cumplir con la palabra empeñada, de lograr para nuestro pueblo un mejor porvenir, más ahora cuando cada ciudadano que depositó en las urnas su voto a su favor, está esperanzado en no ser defraudado, considero que desde estos meses de transición hacia el poder como presidente electo, debe meditar detenidamente cada paso que dé, principalmente en cuanto a los que tienen en lista para los elevados cargos de su gobierno que se iniciará el próximo 1 de septiembre.