Ante Costa Rica el equipo nacional de futsal demostró que hay mucho trabajo por hacer. No estamos ni cerca del nivel que tiene Costa Rica, fue un partido totalmente disparejo que nos hizo dar cuenta que para cosechar, primero tenemos que sembrar.
Para ello Panamá tiene que cambiar su concepto del deporte futsal. Tenemos que pensar en adaptar en primera instancia los partidos nacionales al reglamento oficial de parar el reloj en las pelotas muertas. O por lo menos los jugadores aprender a jugar por hora y media, y no 40 minutos.
Segundo, y a un plazo distinto, las canchas donde jugamos en Panamá son demasiado chicas. Esto será más difícil, pues habría que construir instalaciones y eso no es cosa de un día para el otro. Ahora tenemos la ventaja del Gimnasio Roberto Durán ampliado, que por mientras servirá perfectamente para los entrenamientos de la selección.
Tercero el estilo de juego es otro mundo. Nos comentaba un amigo tico que acá tienen tres cuadros. El primero que sale y se encarga de desgastar al rival, uno segundo que entra y es más fino con el trato de la pelota y otro que es el que soporta marcadores.
Es otro nivel, otro mundo de futsal, pero afortunadamente no está lejos de nuestra realidad, sólo que tenemos que adaptarnos a las reglas del juego, sobre todo si se trata de la selección. Ya entendí por que "Babau" quería usar un boxeador como ayudante momentáaneo en sus charlas técnicas.
Y es que el futsal que jugamos en Panamá, aunque nos duela reconocerlo, es un futsal no competitivo con lo que mis ojos vieron en Costa Rica. Claro, ellos tienen años y años de trabajar en esta modalidad que tiene una estructura muy fuerte en organización acá. Nosotros apenas intentamos ser algo. Somos chiquillos en pañales....
Hay que dar paso a paso. Costa Rica nos ayudó mucho a ponernos en nuestra realidad a demostrar que aquí el trabajo apenas inicia, pero no hay que rendirse...
Por lo menos tenemos una selección nacional, que debemos respetar y al técnico hay que dejarlo trabajar, era tonto pensar que le ibamos a hacer un buen partido a Costa Rica. A veces hay que ser humildes y aceptar las cosas. En futsal hay mucho por hacer, pero por ahora solo somos unos aprendices, que deben imitar a los grandes, para llegar a ser como ellos...