Para quienes piensan que el folklore es sólo polleras, bailes típicos y sancocho, están equivocados.
Conversando con dos grandes conocedores del folklore nacional Oscar Poveda y Edmundo de la Cruz, nos atrevimos a hablar un poco de este tema que para estos días capta toda la atención del panameño.
De acuerdo a Cruz como en todo lo que el hombre hace , en la política no deja de haber expresiones de folklor, tanto de los candidatos como de los seguidores, como por ejemplo la manera de saludar, de estrechar la mano y de dirigirse a sus adeptos, ha sido uno de los elementos que identifican al político panameño, mientras que el pueblo, como se le llama a la masa de votantes, también no deja de tener expresiones que hacen del período electorero todo un acontecimiento repleto de folklore, que no es más que el saber popular, y qué más popular que la oportunidad que tiene un pueblo para elegir a sus gobernantes.
Para Oscar Poveda la política panameña posee una alta carga folklórica, cuando por ejemplo un candidato realiza una gran caravana, está realizando una manifestación que en el siglo pasado realizó Belisario Porras, a diferencia que no eran autos los medios, sino caballos.
Y qué decir, continúa diciéndonos el catedrático, las grandes caminatas son herencia de Omar Torrijos y de la forma tan particular de los políticos de levantar los brazos al saludar muy propio del Dr. Arnulfo Arias. Todo eso es folklore.
Qué decir de los panameños que para estos días cambian sus ropas por los colores de su partido, aunque, sean los menos llamativos o atractivos. Por eso cuando vea algún candidato llevándose un niño a sus brazos o dándole un beso a una anciana, tenga por seguro que está frente a una escena folklórica, por que esto mismo lo hizo el candidato pasado, y hará el que viene.
