El director del Sistema Penitenciario, Carlos Landero, analiza cambios en el menú que la empresa ALIPRAC entrega diariamente a más de 9 mil detenidos.
Las consideraciones de Landero surgieron tras concluir una visita a la fábrica de ALIPRAC, ubicada en El Crisol.
Previa consulta con los reos que purgan condenas en la Cárcel de Mujeres, en La Chorrera, en Colón y en los presidios de La Joya y La Joyita, Landero recomendó mejorar el servicio.
Se decidió reducir porciones de arroz en la Cárcel de Mujeres a cambio de ensaladas, mientras que en La Joyita se aumentó la porción de arroz a 10 onzas para cumplir con las peticiones de los presos que intercambiaron un refresco por mayores porciones de arroz en el almuerzo y la cena de las que se entregan de acuerdo al contrato suscrito entre ALIPRAC y el Ministerio de Gobierno y Justicia.
En torno a las quejas de algunos reclusos sobre la alimentación, dijo que detrás de las protestas y la campaña de desprestigio está la mano negra de una organización que dice defender a los privados de libertad, molestos porque el MINGOB se rehusa otorgarles presencia permanente en las cárceles donde lucran con parientes de los presos.
