Eran las 7:45 a.m. del sábado, cuando en la casa de la familia Bedoya, en la barriada La Siesta de Tocumen se escuchó el timbre del teléfono y a la empleada que contestó, le preguntaron por Rosa Bedoya, quien se estaba acostada en su cuarto. Esta salió y habla por la línea, luego regresa a su habitación y media hora después se ahorca.
Con los minutos que precedieron al suceso, los Bedoyas informaron a las autoridades sobre el cruel suceso. Inmediatamente el radio operador de la Subestación de Policía de Don Bosco en Juan Díaz, comunicó a Los Linces, quienes confirmaron el suicidio.
Los vecinos de Rosa, en la calle Miraflores, notaron que la residencia Nº 636 donde vivía la mujer con sus tres hijos, estaba aglomerada de personas y policías. Era señal de que algo malo transcurría en el vecindario.
LOS DETALLES
Dentro del armario de su propia habitación se quitó la vida, Rosa Bedoya, de 25 años, quien hizo un nudo en su cuello con la sábana con que dormía y la amarró al hierro donde colgaba su ropa.
La empleada, una menor de 16 años, quien encontró el cadáver, no tardó en cortar la sábana y bajo el cuerpo con vida de su patrona, aunque segundos después los latidos del corazón y por ende su pulso, pararon, dijo una fuente relacionada con la investigación.
Un paramédico, que llegó en la ambulancia de la Policlínica JJ Vallarino y socorrió a la víctima, dictaminó su muerte.
A la 12:00 del mediodía, la Fiscalía Auxiliar levantó el cadáver y los hombre de casaca negra, que laboran para la Sección de Homicidio de la PTJ dictaminaron el suicidio.
HIPOTESIS
De acuerdo con una fuente, la víctima se estaba tratando con un psiquiatra.
Hacía días que los lugareños la notaban la autoestima baja.
RESEÑA
Personas a llegadas a Rosa Bedoya, señalaron que era una chipa muy guapa y trabajaba de mesera en un local comercial, localizado en Amador. Dejó en la orfandad dos varones que estudian en la básica y una niña de dos años.
DE INTERES: ESTADISTICA
El suicidio es una de las formas de homidio más enigmático que existe.
Según las cifras que maneja el departamento de suceso del tabloide Crítica Libre a la fecha van dos féminas que se ahorcan en la ciudad capital.