Los carteles de la droga han contratado sicarios locales para ejecutar a varios tumbadores de drogas en Panamá, reveló una fuente ligada al aparato de represión del narcotráfico.
Según el informe, la orden no es sólo contra al exinformante de la DEA, David Viteri, sino que incluye a otros panameños involucrados en tumbes recientes.
Los potenciales blancos saben de la existencia de los contratos y se han mandado a recoger, adelantó el informante.
Al mismo tiempo se informó que la estación de la DEA en Panamá está preocupada, porque se viene presentado a Viteri como un exmiembro de la agencia, cuando éste sólo tenía el grado de informante, y la relación se rompió cuando se desvió del buen camino.
En tanto, la Fiscalía de Drogas inició una investigación para determinar la procedencia del dinero para adquirir las camionetas 4x4 con placas 302896 y 514899 utilizadas por Viteri y su asesinado compadre Johnny Pozo.
Además no se descarta abrir otro proceso contra Viteri por apología del delito, en base a declaraciones que brindó a TVN, donde advirtió que mataría a cualquiera que reconozca que viene con la intención de atentar contra su vida.
Este no es el primer intento de los carteles por eliminar a tumbadores en Panamá y para ello contratan a matones del patio, a quienes le ofrecen un adelanto de B/.500 para movilización, sobornos y luego cuando eliminan al blanco, se paga el resto del contrato.
Ya en julio del 2004, la Policía Nacional -a través de la Operación "Grúa"- capturó a varios colombianos y a panameños que estaban tras la pista de cinco sujetos que le habían tumbado 400 kilos de cocaína al cartel en Río Hato.
En el caso de Viteri, éste alega que el tumbe lo realizó en 1997 a miembros del Cartel de Cali, que le han pagado a integrantes de la banda de "El Pentágono" para que lo maten.
Según los abogados de Viteri contra éste no hay orden de arresto y es probable que acuda mañana a la Fiscalía Auxiliar para rendir declaración en el asesinato de su compadre Johnny Pozo.
En tanto, el exsargento y excustodio en La Joya, Alexander Alberto Justiniani, quien resultó herido durante el ataque que cobró la vida de Pozo, fue liberado a las 12: 45 p.m. de ayer.
El abogado agregó que en el caso de Justiniani se extendieron mucho en mantenerlo preso desde el jueves, porque "él era una víctima del delito, no un victimario".
Justiniani es un hombre fiel a Viteri al punto que cuando éste permanecía detenido en El Renacer le llevó a uno de los equipos de Anaprof para un partido amistoso con los detenidos de ese penal.
Junto a Viteri fue investigado en junio del 2001 por el supuesto secuestro de un narcotraficante colombiano. También en el 2003 figuró en las sumarias por el homicidio del excónsul de Panamá en Guayaquil, Manuel Cervides Lacayo.