Aunque los delicuentes parecieran estar tomándose el país, todavía en el interior se tiene un poco más de tranquilidad.
Para algunas familias azuerences, la tranquilidad se da, porque todavía existe una Juventud sana, donde los niños tienen juegos sanos y pasan mucho tiempo con sus padres.
Trinidad Delgado, residente en Santa Ana de Los Santos, es una de esas madres que organiza días de campo, junto a su hijo y sobrinos, donde la diversión es jugar en un potrero, ya sea para béisbol, volar cometas, comer algo de frutas del campo y llevar algo de leña a la casa.
"Siempre llevo a los niños a pasear, lo hago porque así fue mi niñez, muy sana y, hoy, mis amigos de esa época son gente de bien y quiero que lo mismo le suceda a mi hijo".
Por otro lado, existen familias como los Iturralde Delgado, quienes esperan con ansias el verano, para ir a la toma de agua en Chitré; que es una represa del río La Villa, donde acuden decenas de personas de Chitré y pueblos aledaños a bañarse.
Algunos llevan sus flotadores, otros improvisan deslizaderos y, los más atrevidos, se tiran de los árboles al río. Es preciso señalar, que la tecnología no ha invadido a la niñez azuerence, porque todavía uno de los juegos preferidos de los niños es "El escondío", que consiste en un grupo de varios niños que se esconden y los otros los tiene que buscar; al primero que encuentran, ese es el que le corresponde la otra vuelta de búsqueda y así sucesivamente. Según los niños, lo divertido es que no te encuentren.