E n estas elecciones las cosas continúan igual, siguen siendo preelectoral y a los candidatos que apodan "los primos" a pesar que intentan atacarse, nada ocurre, ya es muy tarde para hablar de campañas sucias.
Sin embargo, aparece un nuevo candidato, el abstencionismo, que pretenden algunos grupos, en especial de izquierda de apoderarse de él, siendo un interesante síntoma el que 70.000 panameños no se interesaron por obtener la cédula nueva y hay 30.000 que no se interesan en buscar.
Estas elecciones serán recordadas por que fueron muy aburriditas y por la cantidad de vallas y "vanns" colocados. Decía un viejo parroquiano que antes los niños y jóvenes se ganaban algo pegando papeletas, en esta política no hay nada.
El hijo de Omar tiene copado todos los talleres que hacen las vallas porque mando hacer 200 de estos grandes tableros. Qué pensaría si estuviera vivo el comandante, de que se olvidaron de los patrullajes domésticos.
Es más, muchos comentaristas radiales le ofrecen cuñas gratis a sus amistades, pero la pereza es tan grande, que ni siquiera hacen el esfuerzo por hacer la producción. Al menos que el gran problema sea que no hay dinero.
Esta campaña será recordada porque estuvo marcado contra los feos. La reproducción de los candidatos salen perfectas y los que son chocolates, salen más claro. De todas las "vanns", es el de doña Teresita con Martín, éste vistiendo una camisa verde, a pesar, que los populares cambiaron al color azul. Lo otro interesante es que el empresario Alejandro Posee Martín se quito el bigote, abandonando su típico estilo de ranchero mexicano.
A pesar de lo aburrida, intentan darle color con la quinta papeleta o las reformas constitucionales que hacen que esta campaña sea mucho más lunática.
Muchas otras cosas más, entre ellas la falta de oratoria de los candidatos, la hacen monótona y la respuesta popular será con la indiferencia, todo parece predecir que el candidato que sacará más voto será el abstencionismo, aunque otras cosas sean las que nos digan las mediciones.