Estados Unidos advirtió que no mantendrá encuentros bilaterales con Siria e Irán en el marco de la denominada "reunión de vecinos" para estabilizar Irak, una cita que para la Casa Blanca no supone un cambio de rumbo en su política exterior.
La matización fue realizada por el portavoz de la Casa Blanca, Tony Snow (en la foto), quien recordó una serie de reuniones y conferencias a las que ambos países han asistido y cooperado.
Snow dijo que la pre-condición para negociar con Irán es que renuncie a fabricar un arma nuclear.
Hasta el momento, la administración de George W. Bush se había negado a dialogar con Siria e Irán para salir de la actual situación en Irak.