El primer ministro de Italia, Romano Prodi, recibió el voto de confianza que necesitaba para continuar al frente del país.
Tras someter la permanencia en el gobierno de su coalición de izquierda a la aprobación del Senado, el economista salió airoso. Obtuvo 162 votos a favor y 157 en contra.
"Il Professore", como le llaman en Italia, salió también con los bolsillos llenos de desafíos. El principal es convencer a casi el 40% del electorado de que el partido que preside -La Unión- está unido.
Hace una semana, el primer ministro sufrió una dura derrota en el Senado sobre sus propuestas de política exterior, lo que forzó su renuncia.