Comerse unos patacones sin sal no es muy grato, pero cuando se le da un toquecito de sal, todo cambia.
Tal vez usted no tenga idea de cómo se hace la sal, por eso le explicaremos paso a paso cómo se produce este producto, que sin ella, la comida no sabe a nada.
FORMAS
Existen dos formas de producir sal, a través de plásticos y la tradicional (hueco).
Tanto la de plástico como la de hueco, el proceso es casi igual, con la diferencia de que la de plástico es más rápida y la sal sale totalmente blanquita. Mientras que la de hueco demora un poquito más en cristalizarse y sale menos blanca.
Cuando es de plástico, se hace el destajo (donde va la sal) de 70 metros cuadrados, al mismo se le pone arena del mar, para cuando se coloque el plástico, éste no se rompa.
Cuando ya está terminado el destajo, se prosigue a darle agua que proviene del mar, a través del estero que desemboca en los terrenos de la salina.
Para hacer pasar esta agua, se hace por medio de tubos y una bomba de halar agua, la que va llenando poco a poco el destajo.
Al terminar este proceso, hay que cristalizar el agua, ya que el grado de salinidad que viene del mar es de 1 a 2 grados. Esto no es suficiente y, por eso, existen unas plazas de agua a las que le llaman calentadores, que tienen entre 18 a 24 grados de salinidad.
Dichas plazas de aguas se introducen en el destajo. A partir de allí, se espera de 8 a 15 días para cristalizar totalmente el agua.
Cuando ya se ha cristalizado, diferentes personas se dedican a sacar la sal y la introducen en sacos, la amarran y de allí los camiones la transportan hacia los jorones (depósitos), ubicados en la comunidad de La Honda de Los Santos.