La noche del viernes, el sonido del patrulla 9525 de la unidad de control de multitudes alertaba a los médicos del Cuarto de Urgencias del Hospital Santo Tomás, que un paciente necesitaba de atención.
Alexander Aparicio, de 15 años, recibió heridas de perdigones en el codo izquierdo, cabeza y mano derecha.
Grupos armados protagonizaron una balacera en el corregimiento de Curundú, resultando el menor herido.