El Papa Benedicto XVI hizo ayer un nuevo llamamiento a favor de la convivencia pacífica en Oriente Medio e Irak y dijo que ante el agravamiento de la crisis "es necesario justicia y un serio y creíble compromiso de paz, que por desgracia no se ve".
El Pontífice hizo el llamamiento ante miles de personas reunidos en la plaza de San Pedro para el rezo del Angelus.
"Sigo con creciente preocupación los acontecimientos en Irak y Tierra Santa. De frente, por una parte, a la violencia ciega que está haciendo destrozos, y por otra ante la amenaza del agravamiento de la crisis que desde hace días es más dramática, hay necesidad de justicia y de un serio y creíble compromiso de paz, que por desgracia no se ve", dijo el Papa.
Benedicto XVI agregó que "por ello" pide a todas las personas que se unan en una plegaria "confiada y perseverante" para que el Señor "ilumine los corazones y nadie se sustraiga al deber de construir una convivencia pacífica y reconozca que cada hombre, a cualquier pueblo que pertenezca, es un hermano".
También el Papa Ratzinger habló sobre el valor de la familia. "Os pido orar por todas las familias, que viven de acuerdo a la vocación que Dios les ha dado y se benefician de su tradicional bendición".
