Que una persona se sienta erótica siempre, es un gran dilema porque el mundo agitado en el que nos desenvolvemos diariamente impide que así sea. Para empezar, tener tantas responsabilidades juntas te lleva a un agotamiento mental y físico, lo que impide que la labor sexual se vea opacada; sin embargo, cuando se puede, se puede; y hay que saber hacerlo para que dure como en esos días cuando la relación apenas iniciaba.
Volviendo al punto del erotismo, es importante gozar del mismo en la relación, más que nada cuando ya se tienen años de relación, para que esa llama se mantenga viva. De no ser así, la pareja empezará a distanciarse y vale la pena empezar a preguntarse una cantidad de cosas: Los límites que imponen el tiempo, los hijos, el cansancio, por qué no incluimos en nuestra "agenda" los encuentros eróticos.
Siempre, aunque no sea una fecha especial, es importante organizar un encuentro íntimo, el que se iniciará con picardía indirecta, y finalmente cuando ambos se sientan ardientes, entonces no hay más que hablar. Aquí no existe cabida para las excusas, si no se tienen hijos, mejor, pero si se tienen, entonces mándelos para donde sus abuelos (sólo como recomendación) pero siempre traten de darse un espacio como pareja. Y es que, si buscamos el crecimiento de nuestra sexualidad explorando todas las posibilidades que esta nos ofrece, debemos concederle tiempo.