El pasado sábado, un menor de 10 años, residente en El Chorrillito, Vacamonte, vivió la más horrible de las experiencias.
Según un conocido de la madre, el niño se había ido con unos amiguitos a tirarle piedra a una construcción cercana.
Aparentemente el seguridad del lugar, un señor de 35 años conocido como "Goyo", atrapó al menor; sus amiguitos corrieron por miedo.
Según el menor, el seguridad lo golpeó con un machete y lo amarró a un palo; luego lo obligó a que se introduciera el miembro masculino en la boca.
El menor aseguró que "Goyo" había eyaculado dentro de su boca. Esas confesiones las realizó el niño dos días después, ya que el temor le impedía hablar.
El conocido manifestó que el pasado lunes cuando en la televisión salió el caso de niña de 10 años violada, le confesó a su madre lo que ese hombre le había hecho.
Al momento de la confesión el menor tenía una fiebre alta y no quería ir a la escuela. La madre lo llevó al médico y la doctora aseguró que el niño tenía residuos de esperma en la garganta.
La madre y otros miembros del sector cercaron al supuesto violador para hacerlo pagar por lo cometido, pero llegó la policía y se lo llevó.