El 3 de febrero de 1989, hace exactamente 20 años, el General paraguayo Alfredo Stroessner Matiauda, quien hasta ese momento dirigía la dictadura más larga de América Latina (él mismo había subido con un golpe en 1954), fue derrocado por golpistas dirigidos por el General Andrés Rodríguez. No solo Stroessner y Rodríguez habían sido amigos y compañeros de armas, sino también compartían vínculos familiares. Después de su derrocamiento, Stroessner se exilió en Brasi, donde vivió por los siguientes 17 años.