El Almería, que dirige el mexicano Hugo Sánchez, se impuso al Athletic de Bilbao 2-1 y se alejó del peligro de la zona baja para asentarse en aguas más tranquilas de la clasificación, al tiempo que frena las aspiraciones del rival.
El conjunto de Hugo Sánchez controlaba el balón, pero no conseguía hacer daño y fue el brasileño Iriney Santos, quien tomó la iniciativa, en el 25 para desnivelar justamente el marcador y aunque su disparo no entró, se estrelló en el larguero y el rechace lo cabeceó Juanma Ortiz a la red, luego el árbitro dejó continuar una jugada y el nigeriano Kalu Uche puso el 2-0.