Un ardiente sol quemaba la piel del pueblo en el estadio Municipal de Bola Suave de Aguadulce. Era la 1:30 de la tarde cuando los ocho ataúdes fueron acomodados bajo una tolda para recibir un homenaje organizado por las autoridades del distrito.
Allí, el ministro de Educación, Belgis Castro, en representación del presidente Martín Torrijos, leyó el decreto 430 del 18 de diciembre de 2007 que declara el 15 de noviembre como el Día del Deporte de Bola Suave.
En el acto, también se entregó a los familiares de los fallecidos las resoluciones de las diferentes instituciones y los suéteres de los jugadores, cuyos números quedaron eliminados de por vida de la Liga de Softbol de Aguadulce.
Tras una breve ceremonia, los dolientes cargaron los ocho féretros por el cuadro de juego, base por base; mientras que el implacable Astro Rey dejaba caer sus rayos con toda la intensidad.
La siguiente parada fue en el gimnasio del colegio Rodolfo Chiari.