El joven hondureño David Suazo, un portento de fuerza y velocidad, truncó las esperanzas de clasificación del PSV Eindhoven, al provocar una expulsión que cambió el partido y al realizar una genial jugada que acabó con el gol del Inter de Milán, marcado por el argentino Julio Cruz.
Aunque no se jugaba nada, el Inter dejó clara su condición de líder del Grupo G y se llevó la victoria 0-1 del Philips Stadion.
El partido cambió en el minuto 28, cuando, después de un patadón de Marco Materazzi para despejar, el hondureño explotó su gran velocidad para encarar al portero. Al ecuatoriano Édison Méndez no le quedó otra opción que derribarlo, lo que le costó la expulsión.