Con la apertura de mercados, Panamá se ha convertido en un potencial exportador. Sólo hay que echar un vistazo a las estadísticas.
Las exportaciones de bienes en el primer semestre de este año fueron de $653.1 millones, con un crecimiento del orden del 13.8%, o sea, $79.1 millones con respecto al mismo periodo del año 2006, que fue de $574 millones.
Los productos tradicionales se han quedado atrás y han abierto paso a los rubros no tradicionales, que se siguen abriendo camino en destinos donde ni siquiera se pensaba que podía llegar el exportador panameño.
Productos tradicionales como bananos, camarones, azúcar café y harina de pescado, que suelen ser los de mayor peso a lo largo de la experiencia exportadora del país sólo representaron un 15.4% del las exportaciones, o sea unos $100.8 millones.
Por su parte, las exportaciones de productos no tradicionales mostraron un crecimiento del orden del 16% con respecto al primer semestre del año anterior, al pasar de $476.3 millones en el primer semestre del 2006 a $552.3 millones en el mismo periodo del 2007, representando el 84.6% del total exportado en ese periodo.
La directora nacional de Promoción de las Exportaciones, Mabel Del Cid, atribuyó estos resultados al Programa Exporta, creado con el fin de desarrollar una oferta exportable diversificada, con valor agregado, de calidad y volúmenes suficientes para garantizar una presencia competitiva en los mercados locales e internacionales.