La existencia de tuberías de asbesto-cemento que continúan enterradas en muchas comunidades y que se utilizan para el abastecimiento de agua potable en los hogares sigue preocupando a los chiricanos.
En Boquete, Volcán y Horconcito, entre otras comunidades, todavía hay tuberías de dicho material, y la comunidad solicita proyectos donde se puedan reemplazar estas líneas por los problemas cancerígenos que pueden generar.
El temor obedece a que en el futuro puedan verse afectados con el cáncer, como lo indican estudios de salud, por la sedimentación que se origina de estas tuberías.
Residentes del lugar consideran que se aplica el dicho que en casa de herrero cuchillo de palo.
En el caso de Volcán, se espera por una planta potabilizadora para mejorar el suministro de agua potable, porque precisamente en estos lugares donde hay abundantes fuentes de agua por su proximidad a la Cordillera de Talamanca y a las áreas protegidas, atraviesan por problemas de suministros de agua.
Héctor Caballero, representante de Volcán, explicó que este corregimiento sigue atravesando serios problemas con el abastecimiento de agua potable y aún la comunidad no recibe respuestas.
Actualmente, la comunidad se abastece de agua de manantiales a través de la gravedad, por las condiciones topográficas que existen en esta región.