Los habitantes de Caracas se preparan para cortes de agua de hasta 48 horas que se prolongarán de noviembre a mayo, en una situación que el Gobierno venezolano achaca al clima, y los opositores a la falta de inversión en infraestructuras. Precisamente, el mandatario venezolano arremetía la semana pasada contra las "duchas de media hora" y señalaba que con tres minutos "es más que suficiente".
El Gobierno prepara también planes de interrupción del suministro eléctrico lo que ha motivado duras críticas en el país, uno de los más ricos del planeta en materia de energía.