Para conmemorar los dos años de la tragedia, ayer hubo una misa temprano en la Catedral Metropolitana, donde el párroco Guillermo Tejada hizo un llamado a la sociedad para que la muerte de esos 18 panameños no quede en el olvido, y sirva para mejorar el sistema de transporte en el país.
Luego de la homilía, los familiares de las víctimas estuvieron en la vía Martín Sosa donde junto a oficiales de Ecuador y algunas autoridades estatales, se pintaron 18 corazones azules, como símbolo de la nueva campaña que busca evitar muertes en las calles del país por accidentes de tránsito.
Allí el presidente del Movimiento de Usuarios del Transporte Público, 23 de octubre, David Ramírez, dijo que el dolor que sienten todos los días por sus seres queridos que perdieron la vida hace dos años es el mismo, pero los conforta que se pongan en ejecución nuevos programas para minimizar los accidentes en las calles.
Uno de estos programas, es el de "No más corazones azules", donde se espera que el mismo llegue a la conciencia de los panameños y minimizar en lo posible los altos índices de accidentes de tránsito en el país.
A su vez, Heraclio Batista, director de la ATTT, quien participó de todos los actos, reiteró el compromiso de las autoridades y ciudadanía en general de evitar en lo posible que el número de víctimas por accidentes de tránsito siga en aumento.