El Fenerbahce sorprendió a un Inter de Milán acechado por las bajas, en el enfrentamiento de Roberto Carlos ante su primer equipo en Europa, que pudo acabar en goleada para el conjunto turco.
Un balón centrado desde la derecha, lo enganchó Daivid en el aire con un potente derechazo que envió a la red al minuto 43. Era el justo premio al dominio local.