Las Naciones Unidas inician hoy su sexagésimo segundo periodo de sesiones. Desde el 25 de septiembre se esperan las declaraciones de jefes de Estado que cada año viajan a la ciudad de Nueva York a presentar su mensaje al mundo.
El problema del cambio climático será uno de los temas de la Asamblea General de la ONU, algo que toca directamente a Panamá y su gran proyecto nacional: la ampliación del Canal, ya que el deshielo en el océano Artico ha abierto esta nueva ruta marítima entre Europa y Asia a través de Groenlandia y Canadá, lo que podría disminuir en un futuro el uso de la vía acuática panameña.
La Asamblea General de la ONU es desde 1945 el principal órgano deliberativo de los países. Panamá últimamente se ha convertido en una sede regional de los diversos estamentos de ese foro mundial al acoger en la Ciudad del Saber oficinas regionales de la UNICEF, PNUD y otras. Además. Panamá forma parte del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
El mandatario Martín Torrijos viajará el fin de semana a la ciudad de los rascacielos, primero para asistir a una serie de actos organizados por los Yankees de Nueva York y luego deberá pronunciar su discurso ante la Asamblea General de la ONU.
Es probable que Torrijos aproveche su discurso para promover el tema de la ampliación del Canal e invite a las naciones del mundo a la participación en ese macroproyecto.
De todos modos, cualquiera que sea el tema del debate, lo importante serán las acciones más que los discursos. De no haber voluntad de los gobiernos de los casi 200 países que integran la ONU, los problemas persistirán y quedarán como meros enunciados.