María Raquel Cochez ha aprendido a sentirse cómoda consigo; con todo y que la obesidad era algo que antes le causaba cierta incomodidad, así nos lo dijo y lo demuestra en su vida cotidiana y con su exposición "Fat is shame" (La obesidad es una vergüenza) en Diablo Rosso, en el Casco Antiguo.
Allí exhibe fotos, acrílico sobre lienzo y una especie de instalación.
El sobrepeso, la obesidad y la obesidad mórbida son condiciones consideradas por la OMS como problemas de salud mundial.
María Raquel Cochez "desnuda" lo que algunos consideran un estigma social y por falta de tacto etiquetan a las personas obesas y les hacen pasar malos ratos.
La joven pintora y fotógrafa, en una innovadora muestra en la que no sólo hay demostraciones de errores que cometemos al comer y que pueden conducir a la obesidad, hace a los visitantes partícipes. Los tienta con boquitas y otras delicias que a la larga suman calorías. Antes, apenas entran a Diablo Rosso se les pide, si lo desean, pesarse. Se anota en un papel el peso y se les coloca en la espalda.
Alec Darlington (7 años, 67 libras), Llith Blue (9 años, 72 libras) y Maya estaban entre el grupo que muy orondo caminaba con su peso escrito en la espalda.
Nos dijo María Raquel: "Me pareció interesante la idea de jugar con tu propia imagen, como te perciben los demás".