La fricción entre la Procuraduría de la Nación y el Órgano Ejecutivo, a través de su Secretario Anticorrupción, son evidentes y van en ascenso.
La polémica ocupó ayer parte importante del debate dentro del periodo de incidencias de la Asamblea, y algunos diputados del PRD consideraron los ataques contra el Ministerio Público como "sospechosos".
Ayer, la alta funcionaria pidió respeto a su cargo y solicitó al Ejecutivo que no tergiverse ni malinterprete sus opiniones con relación a los campos operativos de las instituciones encargadas de perseguir y denunciar los actos de corrupción."Como Procuradora General de la Nación, me merezco respeto de todos los otros funcionarios, porque el Código de Ética del servidor público impone prudencia y respeto para referirnos a los otros servidores", enfatizó Gómez.
Núñez Fábrega dijo ayer en TVN, que la Procuradora quiere que el Zar Anticorrupción regrese a "tardes de té y dictar charlas" mientras se producía un "huracán" robos, tal como se dio en el gobierno pasado. "Ella está nadando contra la corriente, porque la gente quiere que se investigue la corrupción".
El también primo del mandatario Ricardo Martinelli comparó la actuación de la Procuradora con un juego de béisbol: en 5 años tiene cero hit y cero carrera, pero llego yo para meter un jonrón con una denuncia con 50 pruebas y ella exclama: Núñez Fábrega no puede jugar.
Ana Matilde ha formado toda una alharaca por las nuevas facultades que le han otorgado a la Secretaría Anticorrupción. Ya el pueblo está cansado de "bombo y platillos", concluyó el zar Núñez Fábrega.