Francia se proclamó por sorpresa campeón del mundo en relevos 4x100 m masculinos, ayer sábado en el Mundial de atletismo de Helsinki.
El campeón mundial de 110 m vallas Ladji Doucouré, Ronald Pognon, Eddy De Lépine y Lueyi Dovy ganaron la carrera en 38 segundos 08
100, por delante de Trinidad y Tobago (38.10) y Gran Bretaña (38.27).
El cuarteto francés supo aprovechar a la perfección la ausencia de Estados Unidos, eliminado en semifinales al perder el testigo en el primer relevo.
Nadie se esperaba este éxito, ni siquiera Guy Ontanon, su entrenador junto con Laurence Bily. "Tenemos una generación masculina con futuro, en la que se pueden depositar muchas esperanzas", declaraba a finales de julio. "Espero un buen relevo dentro de dos o tres años", dijo.
Pero el cuarteto creía en sus posibilidades desde su victoriosa serie en 38 segundos y 34 centésimas, mejor marca mundial, antes del paso de Trinidad y Tobago en 38 segundos 28/100 en la otra semifinal.
"Realmente me motivaron con su tiempo en serie", declaró Doucouré, que tuvo que ceder su lugar en serie a Oudéré Kankarafou para disputar la final de 110 m vallas, en la que se hizo con el oro. "Cuando vi mejor marca mundial me sentí en las nubes".