Se considera a nuestro país como un corredor biológico y se estima que cada año pasan alrededor de unas 112 especies de aves, que viene de Norte a Sur y viceversa.
Estas aves que por lo general son acuáticas, posan en algunas áreas muy específicas, como en el Darien, en el Golfo de Parita y En Chiriquí. Afortunadamente las explotaciones avícolas panameñas, están bien distantes de estás áreas, no obstante es importante resaltar que las mismas cuentan con medidas de Bioseguridad extrema, lo cual las hace menos vulnerable. Panamá cuenta hoy, con dos laboratorios de alta seguridad (Nivel III), para realizar las pruebas ante cualquier sospecha, lo que nos pone en ventajas para tomar las medidas necesarias rápidamente.
Desde 1927 la industria avícola está tecnificada en nuestro país y la misma genera alrededor de uno 56,000 empleos indirectos y unos 7, 000 directos.
En los países donde se han dado estos casos las mediadas han sido extremas, dado a la alta difusión del virus. En tal sentido debe actuarse con prontitud de la siguiente manera:
Sacrificio de todas las aves
Eliminación de las canales y todos los productos animales
Limpieza y desinfección y luego esperar al menos unos 21 días antes de repoblar las galeras.