Una de las grandes necesidades sociales que embarga a miles de familias panameñas de estratos sociales humildes por su condición inestable, es la falta de un empleo, de mejores oportunidades, y la falta de una vivienda propia y digna, ya que la mayoría de las personas viven en cuartos alquilados, y sobre poblados en una sola estructura.
Otros por la carencia de vivienda habitan en pequeñas casuchas improvisadas en estado crítico, edificadas en terrenos de propiedad privada en calidad de invasores, en riesgo de sufrir desalojos inhumanos, como suele ocurrir cuando se registran invasiones de tierras en muchos casos por personas que no tienen un lugar para vivir.
La directora Nacional de Desarrollo Social del MIVI, Virginia Miranda, revela que la institución tiene reflejado a nivel nacional un déficit habitacional aproximado de 250 mil familias.
"En ese sentido el distrito de Arraiján, no escapa de esa realidad siendo un área de crecimiento, esto se traduce en que las necesidades de vivienda van en aumento, en esa medida a futuro se está planteando al Consejo Municipal la creación de una Comisión de Vivienda para trabajar a nivel interinstitucional en coordinación con el MIVI, a fin de dar respuesta a las familias por prioridades", expresó la funcionaria. El MIVI desarrolla varios programas para minimizar el déficit habitacional en el país.
REORDENAMIENTO
Para el alcalde del distrito de Arraiján, David Cáceres, el MIVI debe poner más empeño, a parte de los programas habitacionales, la habilitación de un plan normativo de desarrollo para un reordenamiento general de la zonificación del distrito.