La Familia Real, encabezada por el Rey, y el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se rindieron ayer a la selección española de fútbol y destacaron que su trabajo de equipo proyecta la mejor imagen de España hacia el exterior.
El Palacio Real y el complejo de La Moncloa se vistió de rojo y amarillo para recibir a los campeones del mundo antes de que éstos comenzaran su paseo triunfal por las calles de Madrid liderados por el seleccionador, Vicente del Bosque, y el capitán, Iker Casillas.
En el salón de columnas del Palacio, Don Juan Carlos dio las gracias a los integrantes de la selección por "hacer realidad los mejores sueños" y ser ejemplo de "deportividad, nobleza, buen juego y trabajo en equipo".
Buena parte del protagonismo del acto recayó en las infantas Leonor y Sofía, quienes, vestidas con la camiseta de la selección, pudieron tocar la copa y ponerse las medallas que les prestaron los jugadores.
Los futbolistas, con "la roja" y pantalón de chándal azul, regalaron al Rey Juan Carlos la camiseta de la selección con la estrella de campeón mundial FIFA firmada por todos, el mismo obsequio que ha recibido poco más tarde Zapatero.