El banano se ha convertido en el principal engranaje de la economía bocatoreña.
Primeramente fue sembrado en la Isla de Bocas del Toro, luego en el distrito de Changuinola, donde actualmente se encuentran los cultivos.
Para muchos productores de la provincia es muy difícil sembrar en áreas cercanas a los mercados de Changuinola, ya que las tierras más céntricas están ocupadas por el cultivo del banano. Sin embargo, podemos encontrar las siguientes zonas agrícolas: El Silencio, es una de las áreas de producción más cercanas al centro de Chaguinola allí se siembran plátanos, naranjas, yuca y ñame principalmente.
El Teribe, naranjas, pixvae, ñame entre otros; Charagre, cacao, plátanos y otros en menor escala; Las Delicias, plátanos y ñame, Chiriquí Grande arroz, plátanos, piña y ñame.
Últimamente los programas de desarrollo para las comunidades están incorporando sistemas de producción agroforestales, “árboles y cultivos”, debido a que se busca conservar el ecosistema. Además, que se obtiene tanto madera, leña y los cultivos.
La provincia bocatoreña es reconocida en el ámbito nacional por sus excelentes producciones de plátanos, cacao, cocos, noni, banano y otras, que han presentado aceptación en el mercado nacional por su tamaño, sabor y cocción.
Consecuencia de su agricultura y una diversidad étnica, tan especial la gastronomía bocatoreña presenta platillos en donde aparecen frutas como la árbol de pan, nuez moscada, algas, uva de playa y otras.
Hoy en día se están cultivando otros productos como el arroz y la piña dorada, que contribuyen con el desarrollo económico de la región, el cual está dominado por el banano en un sesenta y cinco por ciento.