Algunos de los llamados combatientes enemigos detenidos en la base naval de Estados Unidos en Guantánamo podrían recuperar su libertad sin necesidad de un proceso legal.
El anuncio del Pentágono llega unos días después de que la Corte Suprema de EU sentenció que los presos en la base militar tienen la potestad de acudir a la justicia civil para que se determine la legalidad de su situación.
En la base hay unos 600 prisioneros musulmanes.