El gobierno de Perú denunció que la banda terrorista Sendero Luminoso azuzó la huelga de maestros en el departamento de Ayacucho, en cuya capital, a 530 kilómetros de Lima, hubo saqueos e incendios en edificios públicos.
Los incidentes estallaron en Ayacucho cuando la policía procedió a desalojar el consejo municipal y la sede regional de Educación. Tras el desalojo grupos violentos saquearon el poblado.
Desde Lima se envió a Ayacucho un contingente policial de elite compuesto por 150 agentes con el cometido de restablecer el orden en la ciudad.