Una verdadera fiesta musical se vivió en el Auditorio Ascanio Arosemena durante el Concierto de Gala de la Orquesta Sinfónica Juvenil Istmeña. Cientos de personas llenaron la sala y aplaudieron a los jóvenes con la euforia que provocan temas que nos llegan al alma.
En cada armónica nota, se plasmaba el trabajo y esfuerzo realizado por estos chicos, cuya pasión por la música los ha llevado a formar parte de este proyecto que surgió en 1999.
La primera pieza de la noche, "Coral Rusa y Obertura", de Piotr Tchaikovsky, fue solo el abreboca de la noche. La noche prosiguió con Danza Noruega y Slovakian Folk Songs, que fueron del deleite de los presentes, al igual que la Declaration Overture de Claude Smith y la presentación del conjunto folclórico santeño de Eduardo Quintero y el Ballet parisien de Jacques Offenbach.