Luz Eleida Quintero, de 49 años, desaparecida desde el pasado 11 de junio, fue encontrada muerta la noche del jueves, con sus manos y pies atados y en avanzado estado de descomposición, en la cantera cerro La Moña, en Buena Vista, Colón.
La PTJ manejaba informes de que Luz permanecía en Colón, porque la última vez que salió de su casa iba supuestamente a visitar a una amiga en el sector del 20, corregimiento de Nuevo San Juan.
Las sospechas salieron después que el carro, un Toyota Corolla gris, fue recuperado en la calle 2 de la ciudad de Colón; desde ese momento se intensificó un operativo de rastreo en la provincia.
Las esperanzas de encontrarla con vida se desvanecieron cuando la noche del jueves, aproximadamente a las 10:00, uno de los sujetos, un supuesto hijo de una amiga -Franklin Cruz- habló sobre el crimen.
El cuerpo -casi esqueleto- estaba entre los matorrales en el camino que conduce a la cantera, a unos casi 500 metros.
Un hombre acompañaba a los funcionarios de la PTJ y la Policía Nacional de Colón, para que dijera dónde había lanzado el cadáver.
En el lugar saturado de un olor pestilente, sólo se veía un suéter rojo de rayas con un pantalón jeans.
Se cree que Luz murió estrangulada el mismo día que desapareció.
Wilfredo Hurtado, jefe de Investigaciones Criminales de la PTJ, manifestó que el sospechoso brindaba declaraciones de hechos falsos, a tal punto que con la Fiscalía Auxiliar sacaron la información precisa, porque decía que se la entregó a unos colombianos.
En la noche del jueves se dieron otras capturas de sospechosos en el caso.