A plena luz del día, sicarios acudieron ayer, martes, a ejecutar una misión mortal. Tenían como objetivo acabar con la vida de un sujeto de 34 años, el que poco pudo hacer para esquivar su destino fatal.
El complejo de edificios de Patio Pinel, en el corregimiento de Santa Ana, lugar considerado como de alta peligrosidad por las autoridades, fue el escenario del nuevo hecho sangriento que sacudió a la comunidad.
Los asesinos tuvieron que subir ocho pisos de la Torre 3 para acudir al apartamento 5 y acabar con la vida de Gregory Geraldo Gordón.
Gordón recibió de parte de sus enemigos, cuatro disparos: dos en la parte frontal de la cabeza, uno en el lado izquierdo de la mandíbula y otro en el lado derecho de la clavícula.
Fue una sobrina de la víctima quien cerca de las 11:30 de la mañana hizo el mortal hallazgo.
La ciudad se volvió a teñir de sangre.
INVESTIGACIONES: MOVILES
Las autoridades investigan el posible móvil del crimen.
El apartamento del ahora occiso estaba todo desordenado y se conoció que a la víctima le fueron hurtadas una computadora y otros artículos de valor.
En el barrio nadie quiso hablar sobre el tema.