Corea del Sur cortó el vuelo de las Súper Águilas nigerianas y aseguró con un empate en Durban (2-2) su clasificación para los octavos de final en detrimento de Grecia, que en el otro partido del grupo B cayó frente a Argentina.
Después de dos derrotas, Nigeria salió en busca de una victoria que les diera el acceso a octavos y que sería la primera en un Mundial desde 1998. La Federación nacional les animó con una prima de 30.00 dólares para cada jugador si se clasificaban.