La felicidad se ha estacionado en ambas orillas del Río de la Plata. ¿Por qué?, Pues porque Uruguay y Argentina ganaron el Grupo A y el B de la Copa del Mundo. Diego Maradona es el hombre más feliz del mundo. Tiene puntaje perfecto, 9 puntos, en tres partidos. Sus 23 hombres están en forma y se aprestan a enfrentar a México en el choque de los octavos. En el campamento argentino todo está bien, y ya los expertos comienzan a reconocer que Maradona está haciendo un gran trabajo. Que ha sabido manejar un grupo de superestrellas que se comportan humildes, con ganas y con el orgullo de pertenecer al equipo de Diego. La máxima de los albicelestes es " Aquí no hay titulares todos tenemos oportunidades" Y así es realmente, contra Grecia hace 7 cambios y después hace debutar a otros 3 jugadores y gana 2x0. Maradona sorprende a todos, está calmado, sabio y solo pensando en trabajar, trabajar para que su equipo mejore.
Pero, no todo puede ser perfecto, Messi no ha podido anotar un gol, pero a pesar de eso, ha sido el conductor del equipo, tiene dos pelotas en el palo y algunas asistencias. La crítica le reconoce el gran esfuerzo que hace.
Su vecino Uruguay, también gana su grupo, con 7 puntos y mejora. Tiene en sus filas a un superestrella a Diego Forlán que guía a sus compañeros y a un artillero que promete más goles Luis Suárez. Los uruguayos tienen una defensa de hierro que no ha permitido goles. En octavos se enfrentará a un rival accesible, Corea del Sur. Su DT Oscar Tabarez maneja bien la estrategia.
Los equipos del Río de la Plata, Uruguay y Argentina, pisan fuertes, demuestran que el fútbol en esa región de la planeta es de lo mejor , es una tradición y algo más.... una religión.