Cuatro personas murieron y más de 150 resultaron heridas a consecuencia del terremoto de 7, 2 grados de magnitud en la escala de Richter que sacudió ayer el nordeste de Japón, según la Agencia Nacional de Meteorología. Otras catorce personas, tres de ellas extranjeras, están desaparecidas.
Se trata del terremoto más fuerte que sacude Japón desde el registrado en el 2005.